Toni Báez y Emy Cazorla dan vida a estos personajes en conflicto, bajo la dirección de Yanara Moreno.
La obra relata como un hombre y una mujer, Óscar y Eva, se conocen por casualidad en la sala de espera de una psicóloga. Por fin han dado el paso que necesitaban para tratar sus adicciones. En ese breve encuentro surge una complicidad que los impulsa a depositar sus esperanzas en el otro y deciden comenzar un camino junto. ¿El mejor para los dos? La dependencia extrema entre Óscar y Eva no deja de generar preguntas, algunas sin respuesta. ¿Son destructivas las relaciones de pareja tal y como las entendemos? ¿Son las relaciones de pareja un lugar para encubrir nuestros vacíos en vez de para nutrirnos? ¿Qué nos lleva a someternos a la violencia tanto como víctimas o como verdugos? Partiendo del texto de Yolanda García Serrano “Dónde pongo la cabeza” y de la inquietante “Antología de Spoon River” de Edgar Lee Máster, surge Óscar y Eva. El fortuito descubrimiento de este texto fue el motor para la construcción de “Óscar y Eva”, el retrato de dos seres bien reconocibles actualmente.